miércoles, 26 de agosto de 2015

Experiencia

La única ventaja que te da la edad a la hora de hablar de cualquier tema y con cualquier persona, sin duda, es la experiencia.
Siento que esta arma poderosísima de la buena conversación esta tan mal usada como mal captada. No entiendo en que momento las cosas se confundieron para crear una conclusión incoherente, básicamente asumiendo que si no posees una edad específica, por ende, tampoco posees la capacidad intelectual para poder mantener una conversación interesante y que, por si fuera poco, incluso brindando argumentos irrevocablemente buenos para mantener una cierta posición o cuestión.
La experiencia, si, es algo que sólo el tiempo (y sólo el tiempo) brindará, pero no sólo hay que darle el mérito a la palabra como tal puesto que deberíamos darle un significado un poco mayor y entender que lo valioso de la "experiencia" es el aprendizaje que conlleva; el aprendizaje de que erramos en algo y aprendimos de ello por lo que adquiramos el valor de la experiencia que se presenta en situaciones imprevistas de la vida. Decir que una persona con cierta edad y larga trayectoria de vida tiene experiencia, sin lugar a duda, es algo lógico y verdadero, pero decir que una persona habla y actúa con experiencia es algo bastante inexperto, inexperto porque no se ha adquirido ese conocimiento de saber que la experiencia que realmente tiene valor ante la palabra y la discusión no es un título que se otorga y se va enriqueciendo con el tiempo, si no, es la que fue analizada y explotada en cuestión de pensamiento hasta llegar a un punto en el cuál lo que se aprendió no se olvidó y desencadeno nuevas cuestiones.

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